Hay gran variedad en recetas de tartas de queso, pero ésta es hasta ahora la que más me gusta de todas con las que me he experimentado (y la que más alabanzas se ha llevado)

Ingredientes:
Para la base:
250g de galletas
50g de mantequilla
30g de licor (en este caso ron)
50g de avellanas (opcional; también otros frutos secos)
3 huevos grandes
1/2 litro de leche
180g de azúcar
2 sobres de cuajada royal
Una tarrina de queso Philadelphia o similar (también se puede hacer usando 6 quesitos tipo "El Caserío" y queda igual de buena!)
Por otro lado, un bote de mermelada de frutos rojos (fresa, frambuesa, arándanos...)
Preparación:
- Hacemos la base de galletas triturando las galletas. Añadimos la mantequilla y el licor (en este caso, ron), y mezclamos bien. Con esa pasta forramos el fondo de un molde desmontable.
- A continuación, poner el resto de ingredientes en el vaso, a excepción de la mermelada, y programar 7 minutos, temperatura 90ºC y velocidad 5. La mezcla tiene una consistencia bastante densa al terminar el tiempo. Si vieseis que aun está muy líquida, poner un par de minutitos más a la misma temperatura
- Vaciar todo el contenido del vaso en el molde que habíamos cubierto con la pasta de galletas.
- Seguidamente se mete en el vaso la mermelada y se programan 2 minutos, Tª de 90º y velocidad 2. La mermelada se echa sobre el contenido del molde y se deja enfriar en la nevera.
Ya veréis qué cosa tan rica!!
Actualización
Para los que no tengan Thermomix, si os ha gustado, también podéis hacerla:
Basta calentar la leche hasta que hierva, y meter el resto de ingredientes en la batidora. Cuando rompa a hervir, se echa el resto de ingredientes que habíamos pasado previamente por la batidora, sin dejar de mover para que no salgan grumos.
Actualización
Para los que no tengan Thermomix, si os ha gustado, también podéis hacerla:
Basta calentar la leche hasta que hierva, y meter el resto de ingredientes en la batidora. Cuando rompa a hervir, se echa el resto de ingredientes que habíamos pasado previamente por la batidora, sin dejar de mover para que no salgan grumos.